Cómo destetar a los gatitos a los que les proporciones un hogar temporal
Destetar a los gatitos
El destete puede comenzar a las 3½ a 4 semanas de edad. Comienza ofreciéndoles fórmula en una cuchara. Una vez que estén lamiendo la cuchara, intenta poner un poco de fórmula en un platillo. A medida que dominen cómo lamer la fórmula del plato, puedes agregar gradualmente una pequeña cantidad de comida enlatada a la fórmula en el plato, haciendo una papilla (que se conoce como gachas). Aumenta la cantidad de comida enlatada lentamente, agregando más comida y menos fórmula. Algunos gatitos se adaptan de inmediato, otros pueden tardar unos días. Para asegurarte de que los gatitos estén recibiendo suficiente comida, es posible que debas seguir alimentándolos con biberón varias veces al día, hasta que coman bien por sí mismos. Asegúrate de alimentarlos con lo que necesitan para estar llenos, pero no les des de más.
Monitorea las heces de los gatitos para asegurarte de que toleren y digieran bien la mezcla de gachas. Si los gatitos tienen heces sueltas, reduce la cantidad de comida enlatada y aumenta la fórmula hasta que sus sistemas se hayan adaptado. A medida que los gatitos se adapten a la mezcla de gachas y agregues más alimentos enlatados a su dieta, también puedes agregar más agua a la mezcla de fórmula. Si estás usando la fórmula KMR, agrega una medida adicional de agua cuando prepares la fórmula. En lugar de 1 parte de fórmula con 2 partes de agua, mezcla 1 parte de fórmula con 3 o 4 partes de agua. Para la fórmula de Hoskins, puedes agregar una onza extra de agua a la receta.
Como los gatitos coman más comida y menos fórmula, necesitarás tener un recipiente con agua fresca disponible en todo momento para mantenerlos bien hidratados. En este momento, también puedes agregar alimentos secos a su dieta. Agrega un poco de la mezcla de fórmula diluida a la comida seca para atraer a los gatitos a comerla. Reduce gradualmente la fórmula y déjalos comer los alimentos secos. Nuevamente, monitorea las heces de los gatitos para asegurarte de que estén tolerando bien la comida. Si la diarrea o el estreñimiento persisten con el cambio de dieta, comunícate con tu personal médico.
Peso e hidratación
Continúa pesando a tus gatitos todos los días, preferiblemente a la misma hora todos los días, usando una balanza de cocina o una balanza postal. Los gatitos deben aumentar aproximadamente ½ onza todos los días o de 3 a 4 onzas por semana. A las ocho semanas, la mayoría de los gatitos pesan alrededor de 2 libras. Anota el peso diario de cada uno en el libro de registro. Si los gatitos no están aumentando de peso o están perdiendo peso, comunícate con tu personal médico de inmediato. Un gatito bien alimentado debe estar correctamente hidratado. Para constatar la hidratación de un gatito, tira hacia arriba de la piel en la nuca. La piel debe rebotar fácilmente. Si no rebota o si baja lentamente, el gatito podría estar deshidratado. Si el gatito parece estar deshidratado, comunícate con tu personal médico.
Entrenarlos a usar la caja de arena sanitaria
Cuando tengan aproximadamente cuatro semanas de edad, los gatitos pueden ser introducidos a la caja de arena. A esa edad, comenzarán a jugar, cavar y explorar materiales sueltos y blandos, como tierra o basura. Como resultado de esta excavación de investigación, los gatitos comienzan a hacer sus necesidades en estos materiales. Por lo tanto, los gatitos no necesitan que sus madres ni los humanos les enseñen a hacer sus necesidades en materiales blandos y sueltos, o a cavar y enterrar sus desechos. Los gatitos simplemente nacen sabiendo cómo hacerlo.
No es necesario llevar a los gatitos a la caja de arena y mover sus patas de un lado a otro en la arena. Si lo haces, en realidad esto puede ser una experiencia desagradable para ellos, y hará que tengan algunas asociaciones negativas con la caja de arena.
Usa una pequeña caja de cartón o una caja de arena de plástico con arena de arcilla suficiente para cubrir el fondo. No uses arena aglutinante. La razón de esto es que los gatitos muy jóvenes tienden a ponerse arena en la boca y jugar en ella. Si usas arena aglutinante, el polvo de la arena puede solidificarse en sus vías respiratorias o digestivas.
Poner en la caja una bola de algodón usada (que utilizaste cuando los ayudaste a orinar) les ayudará a tener una idea de qué hacer a continuación. Coloca a los gatitos en la caja, permitiéndoles familiarizarse con la arena. El instinto natural generalmente prevalecerá y los gatitos comenzarán a investigar, raspar y, en unos pocos días, usar la caja.
Con respecto a la limpieza: Las heces deben sacarse de la caja de arena todos los días. El número de gatitos determinará la frecuencia con la que hay que tirar el contenido y cambiarla por completo. Dos veces por semana es una regla general, pero es posible que debas cambiarla más seguido o menos seguido, según las circunstancias. Si notas algún olor o si gran parte de la arena está húmeda, es hora de cambiar toda la arena.
Cuando laves la caja de arena, no uses productos químicos o productos de limpieza con olor fuerte porque el olor a vinagre, lejía o limpiadores de pino puede hacer que los gatos eviten usar la caja de arena. Lavarla con agua y jabón debería ser suficiente. Dejar que la caja se seque al aire también es una buena idea, pero será necesario tener otra caja de arena de reemplazo mientras la otra se esté limpiando.